Estimados señores míos,
Durante el año 2006, celebramos el vigésimo aniversario de dos hitos que han cambiado radicalmente la vida de todos los ciudadanos de Cataluña: la incorporación de España a la Unión Europea y la designación de Barcelona como sede de los Juegos Olímpicos de 1992. Porque ahora, en perspectiva, sabemos que hace veinte años que Cataluña se encontraba en la rampa de lanzamiento para vivir una de las explosiones económicas y sociales más importantes que una región europea hubiera vivido en la segunda mitad del siglo XX.
Entramos de lleno en el siglo XXI, sumergidos en procesos imparables a los cuales nos tenemos que adaptar y convertir en oportunidades. Cataluña parte de una posición privilegiada, con una base económica sólida y un tejido social cada vez más rico. En la ciudad de Barcelona ya conviven ciudadanos de más de 160 nacionalidades; Cataluña ya se acera a los 3.5 millones de puestos de trabajo y a las 600.000 empresas;
y mantiene casi 800.000 puestos de trabajo industriales.
A lo largo de este libro el lector se ira encontrando con muchos y diversos argumentos que corroboran con detalles nuestros planteamientos. Son hechos expuestos por los máximos responsables de convertir en realidad esta nueva etapa, que muestran su compromiso personal e institucional con el futuro.
El presidente
de la Generalitat de Catalunya